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De las mejores tapas. El lugar está un poco apretado pero el ambiente es re acogedor. El servicio es excelente, los mozos son muy correctos y lo que pedimos llegaba en menos de 10 minutos.
Bar de tapas, che, te lo recomiendo para ir a compartir. ¡Estaba todo riquísimo! Los precios estaban bien de acuerdo a la calidad del servicio. El personal re amable. El único tema fue que le faltaba un poco de luz al lugar.
No es de mi agrado. Platitos chicos tipo tapas, muuuy pretencioso - por eso digo no para mí. Mucha salsa, mucha grasa, poco sabor.
La atención del personal es lo más. Todos re buena onda, amables y serviciales. Me senté en la barra y pude conversar un poco con parte del personal, lo cual estuvo re copado.
Qué lindo lugar y experiencia, che. Los platos para picar están re buenos, son frescos y te los traen enseguida. Hay una variedad de platos interesantes, pero para comer te conviene pedir 3 platos entre 2, así no quedás re súper lleno pero sí contento. Eso sí, los tragos demoran un poco en salir, así que es mejor pedir primero la bebida y después la comida, si no terminás comiendo sin tomar nada. En cuanto al servicio, le pongo 3 estrellas porque nos atendieron dos personas distintas. La primera ni nos preguntó si era la primera vez que íbamos, nos explicó la carta con buena onda, nos dio recomendaciones y se copó. Pero lo contrario pasó con el otro que nos atendió. En promedio: ⭐️⭐️⭐️
Si bien la comida y los tragos estaban ricos, la verdad que no lo recomendaría para cenar, ¿vio?👎🏼 Estaba extremadamente ruidoso adentro, no se podía ni charlar tranquilo, estaba re contra apretado y súper incómodo, y nos dijeron que nos retiráramos para darle lugar a otra gente (¡y eso que habíamos comprado dos tragos por cabeza, cenado y tomado postre y no habíamos pasado ni 2 horas allí!). Me fui con un gusto amargo, qué lástima porque la comida estaba buena, eh.
Un lugar pa' picotear y tomar rico y a lo re tranqui. El local es re acogedor y el servicio es impecable. Las tapas, todas exquisitas, y los tragos, igual de buenos.
Simplemente increíble, che. Una carta bien cortita que te hace dudar hasta al más decidido, ¡todos los platos son un golazo! El servicio es de primera, las mozas tienen una onda bárbara, la música no se puede superar, el ambiente re divino y la comida es un 10. Para volver cada vez que cambien la carta, ¡seguro!
El ambiente medio bullicioso, pero con buena música. La atención dejó mucho que desear, la mina que nos atendió para darnos la mesa nos trató mal. La comida está bien (algo demasiado condimentada lo que hace que no se destaquen los sabores propios de los alimentos, sino que se mezclan) pero se gasta bastante por persona para comer bien, las tapas son muy chicas. No te dan una carta, lo que lo hace un poco incómodo. No nos ofrecieron postre, por lo que no pudimos probar su parte dulce. Está bien, no sé si volvería. Lo veo como algo sobrevalorado por los comentarios que he escuchado.
La comida está rica, viste, no es para tirarte de espaldas, el servicio podría mejorar, no te dan mucha bola, y para mí lo peor es que no tienen un menú físico o digital, tenés que estar estirando el pescuezo para ver qué hay en la carta y adivinar qué es, el mozo no te explica los platos ni lo que tienen a menos que se lo preguntes, y si querés postre solo hay una opción que no es muy tentadora.
